‘Sólo me preocupo de mí, de lo que tengo a mi alcance. Yo sé cómo me encuentro, ellas no se como están y no lo puedo controlar.’

Era mi respuesta a partir de la 2ª etapa en The Coastal Challenge, la prueba de 6 etapas que acabamos de hacer este mes de febrero y, en general , sorprendía.

Hace años que me peleo conmigo misma para conseguir controlar absolutamente todo antes de una carrera. Hay más cosas incontrolables que controlables pero he entendido que si me centro en todo lo que puedo manejar, por inferior que sea en porcentaje comparado con lo que no está a mi alcance, el rendimiento es muy superior.

¿Por qué?
1. A nivel psicológico y emocional es imposible abarcarlo todo. Y tratar de llegar a todas partes genera más nerviosismo que confianza.



2. Hay aspectos como la meteorología o el estado de los demás corredores, entre otras cosas, que nunca dependerá de nosotros y aunque queramos hacer suposiciones o previsiones, nunca serán exactas y estaremos destinando esfuerzos a algo innecesario.


3. Si me centro sólo en mi, escucho bien las señales de mi cuerpo tanto a nivel físico como psicológico, conseguiré centrar la energía y mantener la concentración necesaria para gestionarme de la mejor manera.


4. Necesito concentrarme en lo que comeré, beberé, como me abrigaré o me desabrigaré, como gestionaré los diferentes tramos de carrera que puedo estudiar previamente sobre roadbook o perfil.


5. Cuanto más cansancio físico menos aspectos puedo controlar, es importante tener claro qué tengo a mi alcance y destinar todos los esfuerzos.

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